¿Cómo funciona la Ley del Tercio?
La versión estándar de la ruleta consta de una rueda con 37 números y, durante 37 tiradas (spins), la bola no cae, ni mucho menos, en todos los números. Hay algunos números que no resultan ganadores ni una sola vez y, en cambio, otros resultan ganadores repetidamente. Para ser más concretos, existen elevadas probabilidades de que durante estas 37 tiradas la bola caiga tan solo en dos terceras partes del total de números.
La ley del tercio supone que en unas 37 tiradas a la ruleta, se repitan 2 veces unos 9 números, unas 3 veces 3 números y una tercera parte de los números no esté entre los ganadores ninguna vez. Es la distribución matemática de los números ganadores denominada La Ley del Tercio.
¿Cómo se puede probar la ley del tercio?
Encontramos la probabilidad de que, al lanzar la bola 37 veces, algún número arbitrario cae dos veces. Aplicamos el método de prueba por contradicción. Ya que se trata de una repetición, necesitamos un número que ya haya caído y la verosimilitud de que volverá a caer la encontramos al afirmar que este número no volverá a caer en las siguientes 36 tiradas. Dicho de otra manera, en cada tirada caerá cualquier número, excepto el inicial. Pero la posibilidad de que este número resulte ganador es de 36/37, y la probabilidad de que esto ocurra con 36 lanzamientos es equivalente a (36/37)^36.
De esta manera, la verosimilitud que necesitamos de la repetición arbitraria equivale a: 1-(36/37)^36=0,6271. Así pues, cada número que ya haya caído sale una media de 1,6271 veces por 37 lanzamientos de la bola. Correspondientemente, 23 números saldrán una media de 37,42 veces, siendo más probable que en estos 23 números hayan 23*0,6271= 14,42 repeticiones.
La primera repetición se producirá más probablemente en el octavo lanzamiento. Con ello, en la tirada 25, ya se habrán producido 5 repeticiones de distintos números y un número habrá caído tres veces.
La ley del Tercio ha sido puesta a prueba repetidamente. Ha sido demostrada en la práctica mediante la simulación e imitación por computación con una inmensa cantidad de tiradas (decenas y centenares de millones).
Analizando la estadística de trabajo de los lanzamientos de la bola en las mesas de ruleta en establecimiento de juegos reales, también se ha comprobado que la norma de los dos tercios funciona en la práctica.
¿Cómo conseguir un beneficio real gracias a esta ley?
La manera más sencilla de comprender y apropiarse de la estrategia de los dos tercios para el juego en la ruleta es, habiendo escogido una tirada determinada, empezar a apostar en el campo de juego por aquellos números que hayan caído a partir de ese momento como mínimo una vez intentando adivinar su repetición.
Una opción más avanzada de la estrategia de apuesta según la norma del tercio ofrece saber de memoria cálculos teóricos de las probabilidades para cada tirada consecutiva y una corrección más apurada de las apuestas en caso de fuerte divergencia de la previsión según la teoría de la repartición real de los números ganadores. Este método de juego es adecuado exclusivamente para jugadores con mucha experiencia, buena memoria y capacidades de cálculo mental rápido.
Al decidir jugar a la ruleta según la estrategia del Tercio, también sería bueno que el jugador recordara una gran verdad: ¡cualquier cálculo matemático y operaciones teóricas aplicables al juego en el casino cogen fuerza y empiezan a dar frutos en la práctica solamente con el transcurso de un determinado tiempo! Dicho de otra manera, como más elevada sea la cantidad de lanzamientos incluidos en el muestreo, más elevada será la probabilidad de que el resultado real sea parecido al calculado, y con "elevada cantidad" de lanzamientos nos referimos a unos cuantos miles de tiradas y más.